Self harm poem
¿Cómo quieres que no me autolesione? Ayer desperté sin sueño a las 4. Esta noche eran las 3 y media. El otro a las 5. Mi mente estaba fresca, lista para trabajar, para centrarse, hablar, cualquier cosa menos dormir. Comencé a pensar. Empecé a sentirme hueco, triste, innecesario.
Estoy cansado de vivir.
No sé qué es amar.
No amo a nadie y no merezco
ninguna clase de amor.
Me odio.
No puedo dar felicidad y
no merezco ser feliz.
Llevo la muerte lenta sobre los demás
y cuanto más cerca
más muerte, y,
cuanto más tiempo,
más lenta, y,
cuanto más mueren,
más me acerco a mi
propia muerte cierta.
Debo hacerme heridas.
Cortar mi piel en tiras,
quemarla despacio con soldador, y
golpear luego mis costillas,
con nudillos que asorden su dolor.
Y debo poner mi piel morada
con vara de metal,
encarnada, violeta, o con
dura madera de nogal
verla granate y amarilla:
piel maltratada, violada,
quebrada, inflamada,
incendiada e inocente
como toda infancia:
interrumpida.
Soy un cobarde integral.
Soy ese hombre que huye
ante la mujer ideal.
Soy un problema fatal y
soy una mujer yerta;
una flor invernal,
diminuta y vulgar.
Soy una niña sin padre
ni abuelo que le hable
a un hermano que siempre estará,
soy una chica con miedo,
a la locura, al hombre sin sueños
que pudo ser bueno,
al hombre normal
que pudo parecerlo en tiempos.
No soy capaz de dar placer.
No sé practicar mi sexo.
Odio su puerca fealdad y
odio este pene caducado,
su prominencia impertinente,
su brutalidad primitiva,
palpitante y explosiva,
su orgullo adolescente y
ese pelaje permanente,
sus órganos adyacentes y
su húmeda simiente,
punto final de tanta pesadilla
para mucha, muchísima gente.
El sexo ajeno, menos aún.
No sé dónde, ni cómo empieza,
cuándo o porqué se termina.
Me asusta tanto su oferta
como me quiebra su indiferencia,
su perfume o entraña tierna.
No sé si será mejor amarlo,
o si amar la carne deja,
porque de amar yo algo
amaría la nada a secas,
o si la nada es algo
ese algo sería mi queja.
No merezco esta vida que me alimenta.
No la entiendo.
¿Porqué me tiene en cuenta?
No sé porqué empezó,
ni para qué sigo viviéndola,
ni porqué mi madre lo permitió
cuando no podía con ella,
diciendo que no me quería
sin haber nacido siquiera.
Sin tener forma,
sin conocer la luz apenas,
sin sexo ni indecencia,
sin mente ni demencia
provocaba ya el llanto y
el desconsuelo era mi oferta.
¡ Qué no haré sufrir ahora
a estos que me rodean !
¿Cómo quieres que no me autolesione?
Si paso la noche en vela,
torturando mi alma
o lo que de ella queda.
Si no sé hacer otra cosa
desde que el sexo me detuviera,
siendo niño,
perdido entre el amor y la guerra.
HURT - JONNY CASH
Traducción:
Me hice daño a mi mismo hoy, para averiguar si todavía sentía algo.
Me centré en el dolor, la única cosa que es real.
La aguja hizo un agujero, el viejo y conocido pinchazo.
Intenté matarlo, pero lo recuerdo todo.
¿En qué me he convertido?
Querido amigo mio, todos a quienes conozco, al final se van,
y podría haber tenido todo mi imperio
de basura.
Te defraudaré. Te haré daño.
Llevo esta corona de espinas en mi trono de mentiras
lleno de pensamientos rotos que no puedo arreglar.
Bajo las manchas del tiempo, desaparecen los sentimientos.
Eres otra persona más. Yo sigo aún aquí.
¿En qué me he convertido?
Querido amigo mio, todos a quienes conozco, al final se van,
y podría haber tenido todo mi imperio
de basura.
Te defraudaré. Te haré daño.
Si pudiera volver a empezar alejado un millón de millas,
me cuidaría más: encontraría la forma de hacerlo.
"Me gustaría poder cerrar los ojos y ser soplado en polvo y en la nada; sentir todos mis pensamientos dispersarse como pelusa de diente de león a la deriva en el viento". Lauren Oliver
Estoy cansado de vivir.
No sé qué es amar.
No amo a nadie y no merezco
ninguna clase de amor.
Me odio.
No puedo dar felicidad y
no merezco ser feliz.
Llevo la muerte lenta sobre los demás
y cuanto más cerca
más muerte, y,
cuanto más tiempo,
más lenta, y,
cuanto más mueren,
más me acerco a mi
propia muerte cierta.
Debo hacerme heridas.
Cortar mi piel en tiras,
quemarla despacio con soldador, y
golpear luego mis costillas,
con nudillos que asorden su dolor.
Y debo poner mi piel morada
con vara de metal,
encarnada, violeta, o con
dura madera de nogal
verla granate y amarilla:
piel maltratada, violada,
quebrada, inflamada,
incendiada e inocente
como toda infancia:
interrumpida.
Soy un cobarde integral.
Soy ese hombre que huye
ante la mujer ideal.
Soy un problema fatal y
soy una mujer yerta;
una flor invernal,
diminuta y vulgar.
Soy una niña sin padre
ni abuelo que le hable
a un hermano que siempre estará,
soy una chica con miedo,
a la locura, al hombre sin sueños
que pudo ser bueno,
al hombre normal
que pudo parecerlo en tiempos.
No soy capaz de dar placer.
No sé practicar mi sexo.
Odio su puerca fealdad y
odio este pene caducado,
su prominencia impertinente,
su brutalidad primitiva,
palpitante y explosiva,
su orgullo adolescente y
ese pelaje permanente,
sus órganos adyacentes y
su húmeda simiente,
punto final de tanta pesadilla
para mucha, muchísima gente.
El sexo ajeno, menos aún.
No sé dónde, ni cómo empieza,
cuándo o porqué se termina.
Me asusta tanto su oferta
como me quiebra su indiferencia,
su perfume o entraña tierna.
No sé si será mejor amarlo,
o si amar la carne deja,
porque de amar yo algo
amaría la nada a secas,
o si la nada es algo
ese algo sería mi queja.
No merezco esta vida que me alimenta.
No la entiendo.
¿Porqué me tiene en cuenta?
No sé porqué empezó,
ni para qué sigo viviéndola,
ni porqué mi madre lo permitió
cuando no podía con ella,
diciendo que no me quería
sin haber nacido siquiera.
Sin tener forma,
sin conocer la luz apenas,
sin sexo ni indecencia,
sin mente ni demencia
provocaba ya el llanto y
el desconsuelo era mi oferta.
¡ Qué no haré sufrir ahora
a estos que me rodean !
¿Cómo quieres que no me autolesione?
Si paso la noche en vela,
torturando mi alma
o lo que de ella queda.
Si no sé hacer otra cosa
desde que el sexo me detuviera,
siendo niño,
perdido entre el amor y la guerra.
"Aquí es donde estamos en este momento, como un todo. Nadie queda fuera del circuito. Estamos viviendo una realidad a partir de una fina capa de mentiras e ilusiones. Un mundo donde la codicia es nuestro Dios, y la sabiduría es el pecado, donde la división es clave y la unión hace la fantasía, donde se elogia la inteligencia impulsada por el ego de la mente, en lugar de la inteligencia del corazón." Bill Hicks
A kind of translation from spanish:
How can I not self-harm? Yesterday I woke up sleep deprived at 4. Tonight it was 3:30. The other at 5. My mind was fresh, ready to work, to focus, to talk, anything but sleep. I began to think. I began to feel hollow, sad, unnecessary.
I'm tired of living.
I don't know what it is to love.
I don't love anyone and I don't deserve
any kind of love.
I hate myself.
I can't give happiness and
I don't deserve to be happy.
I bring slow death upon others
and the closer I get
the more death, and,
the longer,
the slower, and,
the more they die,
the closer I come to my
my own certain death.
I must make wounds.
Cut my skin into strips,
burn it slowly with a soldering iron, and
then strike my ribs,
with knuckles that mute their pain.
And I must put my skin purple
with metal rod,
red, violet, or with
hard walnut wood
to see it maroon and yellow:
skin battered, violated,
broken, broken, inflamed,
burnt and innocent
like all childhood:
interrupted.
I am a complete coward.
I am that man who runs away
before the ideal woman.
I am a fatal problem and
I am an barren woman;
a winter flower,
tiny and vulgar.
I am a child without a father
no grandfather to speak to her
to a brother who will always be,
I'm a girl with fear,
of madness, of the man without dreams
who could have been good,
to the normal man
who could have seemed so at times.
I am not able to give pleasure.
I don't know how to practice my sex.
I hate its filthy ugliness and
I hate this expired penis,
its impertinent prominence,
its primitive brutality,
throbbing and explosive,
its adolescent pride and
its permanent fur,
its adjacent organs and
its moist seed,
the end point of so much nightmare
for many, many people.
Other people's sex, even less so.
I don't know where, or how it begins,
when or why it ends.
I am as frightened by its offer
as I am broken by its indifference,
its perfume or tender entrails.
I don't know if it would be better to love it
or if loving the flesh leaves it,
because if I were to love anything
I would love nothingness alone,
or if nothingness is something
that something would be my grumbling.
I don't deserve this life that feeds me.
I don't understand it.
Why does it take me into account?
I don't know why it started,
nor why I continue to live it,
nor why my mother allowed it
when she couldn't stand it,
saying she didn't love me
without even being born.
Without having any form,
barely knowing the light,
without sex or indecency,
without mind or insanity
I was already provoking weeping and
disconsolation was my offer.
What I will not make suffer now
to those around me!
How do you want me not to self-harm?
If I stay awake all night,
torturing my soul
or what's left of it.
If I don't know how to do anything else
since sex stopped me
as a child,
lost between love and war.
*** Translated with www.DeepL.com/Translator (free version) ***
Traducción:
Me hice daño a mi mismo hoy, para averiguar si todavía sentía algo.
Me centré en el dolor, la única cosa que es real.
La aguja hizo un agujero, el viejo y conocido pinchazo.
Intenté matarlo, pero lo recuerdo todo.
¿En qué me he convertido?
Querido amigo mio, todos a quienes conozco, al final se van,
y podría haber tenido todo mi imperio
de basura.
Te defraudaré. Te haré daño.
Llevo esta corona de espinas en mi trono de mentiras
lleno de pensamientos rotos que no puedo arreglar.
Bajo las manchas del tiempo, desaparecen los sentimientos.
Eres otra persona más. Yo sigo aún aquí.
¿En qué me he convertido?
Querido amigo mio, todos a quienes conozco, al final se van,
y podría haber tenido todo mi imperio
de basura.
Te defraudaré. Te haré daño.
Si pudiera volver a empezar alejado un millón de millas,
me cuidaría más: encontraría la forma de hacerlo.